El latigazo cervical, comúnmente conocido como «whiplash» en inglés, es una lesión propia de la región cervical. Aunque puede llegar a ser muy complejo su abordaje, vamos a tratar de explicar los factores más importantes que pueden aparecer tras esta lesión. A menudo se produce resultado de accidentes automovilísticos u otros impactos bruscos (deportivos, caídas,…) y el latigazo cervical puede (y suele) tener efectos debilitantes en la calidad de vida de quienes lo padecen.
El latigazo cervical es una lesión biomecánica que implica una rápida y brusca flexión seguida de una extensión de la columna cervical. Esta secuencia de movimientos induce una serie de efectos patognómicos que pueden manifestarse de manera inmediata o diferida. Los factores patognómicos incluyen:
- Daño de Tejidos Blandos: la aceleraciones y desaceleraciones bruscas pueden causar daño a los músculos, ligamentos y tendones del cuello. Esto puede resultar en inflamación, dolor y restricción de movimiento.
- Lesión de Discos Intervertebrales: la repentina fuerza aplicada a la columna cervical puede causar lesiones en los discos intervertebrales, produciendo hernias o protrusiones que podrían desencadenar síntomas como: entumecimiento, hormigueo y debilidad en brazos y manos.
- Lesión Neurológica: el estiramiento excesivo de los nervios cervicales puede dar lugar a síntomas neurológicos como: dolor irradiado, debilidad muscular y alteraciones sensoriales.
Características clínicas
Las características clínicas del latigazo cervical varían según la gravedad de la lesión. Los síntomas más comunes incluyen:
- Dolor Cervical: el dolor en la zona del cuello es el síntoma más evidente. Puede ser agudo, punzante o sordo, y a menudo se irradia hacia los hombros o la cabeza.
- Rigidez y Limitación del Movimiento: la inflamación y el daño en los tejidos blandos pueden provocar rigidez en el cuello y dificultad para moverlo en todas las direcciones.
- Pérdida de fuerza: el factor neural y el factor de lesión mecánica influyen directamente sobre una inhibición de musculatura profunda del cuello y, normalmente, un exceso de tensión muscular en la musculatura más superficial. A largo plazo y, en caso de no tratarse adecuadamente, suele provocar infiltración grasa de la musculatura profunda.
- Dolor de Cabeza: los dolores de cabeza son un síntoma común y van a menudo asociados con la tensión en la musculatura cervical y las alteraciones en la circulación sanguínea.
- Síntomas Neurológicos: entumecimiento, hormigueo y debilidad en los brazos y las manos pueden indicar una posible lesión nerviosa.
Papel de la fisioterapia
La fisioterapia desempeña un papel crucial en la recuperación de los pacientes con latigazo cervical. Es imprescindible realizar una evaluación exhaustiva para determinar la gravedad de la lesión y diseñar un plan de tratamiento personalizado. Paralelamente se debe llevar un manejo del dolor y la inflamación adecuado a través de técnicas como la terapia manual y el ejercicio terapéutico. En la línea del ejercicio, éste nos sirve también como herramienta para fortalecer y reactivar musculatura inhibida y adecuar la respuesta de musculatura afectada ante estímulos. Es el único método que evita la aparición de infiltración grasa en musculatura profunda. Finalmente, es papel fundamental del fisioterapeuta educar al paciente sobre su lesión. Se abordan aspectos clave como ergonomía, fortalecimiento, estrategias de afrontamiento de la lesión y técnicas para prevenir futuras lesiones.
Dentro de poco realizaremos otro post sobre el whiplash, explicando factores biomecánicos de la lesión, banderas rojas y demás (un poco más dirigido hacia profesionales 😉.
¡Espero que os sea útil la información y hayáis aprendido en este breve resumen!
¡Un saludo!